Cuando lava su auto en la entrada de automóviles o en la calle, el agua sucia no tratada fluye hacia el desagüe pluvial más cercano y va a parar en las vías fluviales locales. Los derrames de líquidos de automóviles procedentes de fugas o del mantenimiento habitual del auto también pueden ser arrastrados al sistema de aguas pluviales por la lluvia, el deshielo o la escorrentía generada por los aspersores.
El agua que utilizó para lavar su auto puede contener residuos de los gases de escape, gasolina, metales pesados formados por la oxidación y aceites de motor que se acumulan en su auto. El jabón que utiliza también puede contener fosfatos, que pueden provocar un crecimiento excesivo de algas en las vías fluviales. Los líquidos de los automóviles son tóxicos para la vida acuática y la vida silvestre que bebe de nuestros arroyos.
Aunque no es ilegal lavar su auto en la entrada de automóviles de su casa, tampoco es una buena práctica. Los centros de lavado comerciales dirigen el agua que utilizaron para el lavado de autos a los sistemas de tratamiento y, en muchos casos, la reciclan y reutilizan. Si necesita lavar su auto en casa, es mejor que lo lave sobre el césped y no en la entrada de automóviles, ya que esto permite que el agua se absorba en el suelo.
Si no se le da mantenimiento a un vehículo, este puede tener fugas de líquido y contribuir a la contaminación del agua. La próxima tormenta recogerá esas gotas en el pavimento y las llevará al riachuelo más cercano.